Datos básicos del sendero:
Olea - Casasola - La Cuadra
La quinta etapa del Camino Olvidado tiene su inicio en la localidad cántabra de OIea. Pasamos por la iglesia de Santa Eulalia y seguimos el camino avanzando entre frescas praderías.
Tras pasar por un espectacular puente romano de la calzada entre ‘Pisoraca-Portus Blendium’ llegaremos a Casasola, viendo en la lejanía los menhires ‘La Matorra I y II’.
En este valle se conocen 8 ejemplares de menhires, pero cabe suponer la existencia de muchos más.
Entraremos por Quintanilla y Quintana hasta Las Henestrosas. El Camino transcurre por pista, atravesando sembrados con un multicolor de tonos verdes, a cual más brillante. Cuena es el último pueblo de Cantabria en nuestra ruta.
Entramos en Palencia, en Néstar, por el puente romano denominado Puenteperdiz.
Desde aquí, por pistas y un tramo de carretera se llega a Grijera. En su término municipal esta constatada la presencia de un castro prerromano atribuido a los Cántabros. Así mismo, por el mismo centro de la localidad atraviesa la calzada romana ‘Pisoraca-Portus Blendium’ que unía lo que actualmente serían las localidades de Herrera de Pisuerga (Palencia) y Suances (Cantabria).
El Camino prosigue por pista hasta llegar a Aguilar de Campoo, preciosa villa que impresiona por su castillo, la Colegiata y sus siete puertas.
Merece la pena perderse por las calles de este bonito y monumental pueblo en el que el Camino Olvidado se separa del Camino de la Calzada, tomando éste, dirección sur hacia Carrión de los Condes.
Los ciclistas pueden seguir el mismo trazado.
Descanso y relax