Datos básicos del sendero:
- Distancia: 3,5 km
- Tiempo estimado: 1 h
- Punto de salida: Monasterio de Herrera
- Desnivel: 110 m
- Dificultad: Baja
- Ciclabilidad: No
- Época recomendada: Todo el año
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Herrera - Red de senderos Miranda de Ebro y entorno
Comarca: Desfiladeros del Ebro
Herrera
Herrera (Desp) es hoy una aldea despoblada perteneciente al municipio de Miranda de Ebro en el límite con La Rioja. Dentro de su término se halla el Monasterio Camaldulense de Santa María de Herrera.
Herrera es sin duda un paraje muy especial, un enclave místico que fue, con toda probabilidad, habitado por anacoretas antes de que la Orden del Císter estableciera allí, en el año 1178, un importante monasterio.
La situación estratégica del valle, a caballo entre Burgos y La Rioja, la abundancia de pastos o la proximidad al Ebro, potenciaron las seculares relaciones que este cenobio mantuvo tanto con Miranda como con Haro.
En la actualidad el monasterio está habitado por monjes camaldulenses, orden religiosa contemplativa fundada en 1012 por San Romualdo en Camaldoli (Italia).
Esta congregación llama a sus monasterios ‘yermos’ para ellos se trata de lugares solitarios donde en clausura, el silencio, la oración y el trabajo rigen el día a día. Por este motivo las visitas al monasterio de Herrera se limitan a martes y sábados en horario de 15:30 a 17:30 y no se permite la entrada a las mujeres.
Se accede al monasterio por una pista sin asfaltar que enlaza con la carretera de Ircio, justo en el límite entre Burgos y La Rioja. El camino forestal se encuentra en buen estado de conservación y por él pueden transitar todo tipo de vehículos.
Un buen emplazamiento para dejar el coche son las inmediaciones de la puerta del monasterio, lugar donde tiene inicio esta ruta.
Desde un pequeño altozano, coronado por varias encinas de buen porte, se accede a un sendero que primero avanza entre los cultivos, para después adentrarse en la espesura del bosque mediterráneo donde las encinas se acompañan de todo tipo de arbustos fructíferos.
La senda es llana, fácil de caminar a través de una vegetación cada vez más densa que llega a formar un corredor vegetal.
Este primer tramo tiene una longitud aproximada de unos 2 kilómetros y se interna en territorio riojano. El camino enlaza con un cortafuegos bastante pendiente, por el que hay que descender con cuidado hasta encontrar otro sendero que, esta vez por el fondo del valle, nos conducirá de regreso a Herrera.
La senda, que pasa muy cerca de la fuente del Pucherillo, es suave y asequible para todo tipo de usuarios, suele haber senderistas y ciclistas que la utilizan para llegar a Villalba de Rioja.
Algo más de 1 kilómetro después se accede a las Salinas de Herrera, cuyas estructuras, víctimas del desuso, se desmoronan y desaparecen ante la implacable proliferación de maleza. Durante cientos de años se extrajo sal de las entrañas de la tierra, siendo una de las más importantes explotaciones de todo el entorno.
Aunque es muy recomendable visitarlas, será necesario extremar las precauciones, puesto que todavía se mantienen abiertos algunos pozos y el estado genera de ruina de las edificaciones no ofrece ninguna garantía de seguridad.
Después, tan sólo resta algo menos de 1 kilómetro de camino algo empinado, para regresar nuevamente a las puertas del yermo.
Información: Ayto. Miranda de Ebro
